Hay personas que llegan a tu vida sin que tú las hayas elegido, sin ser amigos, sin ser familia de sangre, pero que pasan a convertirse en personas fundamentales en tu vida. Te hacen preguntarte cómo has podido vivir todo éste tiempo sin ellas...
A la edad de 31 años aún tengo la suerte de conservar 3 abuelos, grandiosos y enormes para mi los 3, y mi abuelo Jacinto que hace ya diez años que nos dejó.
Pero he ganado dos nuevos abuelos, políticos, que son a cual más maravilloso, que los quiero como si fuesen de sangre, y se que ellos me quieren a mí como a una nieta más, y eso es lo más maravilloso que puede pasarte.
Con todo mi cariño, el video que le hicimos para su cumpleaños, y espero que podamos seguir celebrando muchos más.
Os quiero
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