Todos, hemos sentido en algún momento de nuestra vida, la falta de aliento, un suspiro entrecortado que no termina de realizarse, el sentir de un corazón lleno, a falta de calor, el sobrarnos todo... el faltarnos tanto...
En estas ocasiones nos sobran las palabras para explicarnos, porque con el sentimiento basta.
En estas ocasiones nos faltan las palabras para describir, porque las palabras nos fallan...
Yo no tengo palabras para describir, para explicarme, para hacerte sentir lo que yo siento por ti...
Lo guardo en mi alma, para algún día, entregártela...
Si tú no estas aquí, no se que diablos hago amándote...
Quiero andarme sin rodeos, confesarte que una tarde empecé a morir por ti
Que esta locura de amarte no puede acabar por mucho que te entren las dudas
Hoy me fallan las palabras... me sobran y me faltan a la vez.
Hoy no entiendo la vida... y mucho menos tu muerte.
Hoy quisiera retroceder en el tiempo y volver a vestir de uniforme burdeos.
Volver a nuestro patio a cantar Take That en el recreo...
Tengo tantos recuerdos... y me he perdido otros tantos que me apena no tener ahora ningún tiempo de recuperarlos.
El tiempo y la distancia no pueden romper un sentimiento, y el dolor de una pérdida no entiende de días, años o de metros...
Yo tampoco entiendo... no entiendo porqué suceden las cosas que suceden, si existe el karma, destino, casualidad... nada comprendo...
Hay personas que pasan por la vida sin apenas percatarte de su presencia, y otras que marcan épocas de tu vida y que recuerdas con todo tu amor a pesar del paso del tiempo...
Como he dicho, me fallan las palabras... no puedo más que deciros, Laura Diaz, Laura Cortes, Gema, Patricia, Isabel, Palma, Carolina, y Celia... que me habéis hecho pasar muchos maravillosos momentos con vosotras, con Diana, Inmaculada, Luisa, Kellia (no hay día que no piense en ti, y en que ojalá pudiera ayudar en algo con lo que dejas atrás...) Con los chicos, Jose Luis, Rafa, Jose Mari...
El tiempo pasa, la distancia física y personal se interpone, pero nada nunca podrá borrar mi pasado, y en él estáis vosotros, recordados con mucho amor...
Hoy Celia quiero decirte que eres grande, que nunca dejarás de serlo, que adoraba tu sonrisa y tu seriedad en los momentos debidos. Que de éste grupito de "pavas" vestidas de colegialas burdeos, tú, Patricia, Laura, Diana y Carolina erais mis pilares más fuertes, sobre los que me apoyaba para dar esos pequeños pasos. Que estés donde estés, sea Dios, o como queramos llamarlo, ha ganado una gran persona... Que dejas un vacío inmenso en los corazones de quienes te queríamos... pero nunca dejarás de estar entre nosotros, porque jamás te olvidaremos.
Con todo mi amor, como siempre ha sido, las canciones que me recuerdan a vosotras.
Descansa en paz.
Si, uno de mis libros preferidos sin duda!!!! No puedo ni saber cuantas veces lo habré leído, y cada vez que lo leo me gusta más.
La primera vez que lo leí tenía poco más de 11 años aproximadamente, y fue uno de estos libros que tenía mi madre en la estantería y nunca me llamó la atención, pero después de no saber ya cual leerme me dio un día por ojearlo (teniendo la esperanza de que no hablase todo el tiempo de Dios)...
Y cual fue mi sorpresa al encontrarme con éste contenido, que fue uno de los motivos que me impulsó a estudiar psicología.
He reído, he llorado, y siempre me ha dejado con sensación de que no sé que interpretación darle al final...
Me llamó mucho la atención saber que el autor ingresó en un psiquiátrico para escribir el libro, que desde luego lo bordó.
Ahora cuando estudio ciertas enfermedades mentales me viene a la mente muchísimas veces éste libro.
Hay una frase, que fue la que definitivamente me cautivó :
Hay una película también, (con un gran reparto), ya de paso hablando de estos temas, que me encanta y con la que me he sentido muy identificada en determinados momentos: "Inocencia interrumpida"
Tiene frases que han llenado de sentido muchos estados de ánimos que ni yo he sabido definirlos, y en ésta película me he podido ver reflejada en diferentes personajes y pensamientos, porque todos realmente tenemos "algo", que no nos hace ser "normales" del todo, "estándares" por así decirlos, cuando en realidad lo normal, desde mi punto de vista, es no ser normal.
"¿Alguna vez has confundido un sueño con la vida real? ¿o has robado algo pudiéndolo comprar? ¿alguna vez has estado melancólico? ¿o has creído que tu tren se movía estando parado? Quizás estuviera loca, quizás fueran los 60, o quizás solo fuera una chica... interrumpida"
"El Principito", (Le petit prince), libro atemporal completamente, publicado en el año 1943, y hoy en día a 2013 sigue siendo uno de los libros más conocidos del mundo. Por algo debe ser...
Cuando éste libro cayó en mis manos, debo reconocer que no supe darle el valor que tenía, y ahora entiendo que éste libro, no es un libro para niños aunque lo parezca, o al menos no si no es leído acompañado de un adulto que te vaya haciendo entender cada una de las muchísimas frases que llenan el alma y tanto enseñan de éste libro.
(Vuelvo a insistir en fomentar la lectura en niños como de toda la vida se hacía, leyéndoles de noche antes de dormir, o en su defecto que ellos se lo lean a los padres).
El autor, Saint-Exupèry, por lo poco que sé de él, es que es ganador de varios premios literarios y fue piloto militar en la segunda guerra mundial.
Escribió "El Principito" estando exiliado en los EEUU.
Fue considerado como libro infantil, por la manera de escribirlo y sus ilustraciones (creadas por el mismo autor), pero sin duda, y todo aquel que lo haya leído, sabrá que un niño de poca edad no sabría entender los temas de los que el libro habla, como la soledad, la amistad, el amor...
Es un libro que deberíamos leer varias veces en nuestra vida, tatuarlo en nuestra memoria, y vivir según su filosofía.
Hay tantas frases que no podría ponerlas todas...
"... ahora es único en el mundo".
Nosotros somos los que le damos el valor a las personas, cosas, que nos rodean, sino, sería únicamente un zorro más para nosotros, quizás no para otra persona....
Debemos aprender a valorar todo en nuestra vida, porque si está ahí es porque nosotros así lo hemos decidido.
"Lo esencial es invisible a los ojos"
Y es que ésta frase no requiere de explicación alguna...
Pero es tan importante hoy en día, darla a conocer, que deberían hacer carteles con ella y ponerlos por todas las ciudades, porque parece que esto se ha olvidado...
Hemos caído en el consumismo, todos, nadie nos libramos, y no nos damos cuenta que hay cosas más importantes que un videojuego, un ordenador, un teléfono móvil, un buen coche, un bolso de marca, un maquillaje...
Lo esencial, lo realmente importante, no se ve... se aprecia, se vive, se disfruta de pequeñas cosas, no es aparentismo, no es tener más o menos, no es ser mas guapo o tener mejor cuerpo... simplemente es... algo que se capta sin verlo.
Nuestro interior, que a veces las personas obviamos incluso hasta el nuestro propio dejándonos llevar por el "que dirán", o el "quiero dar ésta imagen"...
El saber disfrutar de pequeños gestos, de momentos que son únicos e irrepetibles, de sonidos que generalmente ignoramos acostumbrados al sonido de la civilización.
¿Dónde quedaron aquellos domingos de playa o campo con la familia? ¿De disfrutar de una rebanada de pan tostado con chorizo, una tortilla de patatas o filetes empanados fríos? Sentarnos bajo un árbol, escuchando el cantar de los pájaros y contarnos historias...
Hoy no se huele el aire, no se pisa hierba, no descubrimos nuestra cara al Sol si no es para ponernos morenos para estar más guapos, no chapoteamos en los charcos bajo la lluvia... lo hemos cambiado por polución, por césped artificial, asfalto, comidas precalentadas y rápidas, juegos de ordenador y televisor hasta en los días mas soleados, cuando antes las calles estaban llenas de niños jugando con pelotas, canicas, cromos, bicicletas... o simplemente hablando y escuchando.
(Este libro también lo he comprado hace unos años en edición especial porque el que tenía de mi madre estaba bastante desgastado, y ahora a pasado a manos de mi sobrino, que espero que lo lea cuando sea más mayor y le encante como me encantó a mi)
Las cosas sencillas, lo básico, lo imprescindible, lo esencial... es invisible a los ojos.
“Fue el tiempo que pasaste con tu rosa lo que la hizo tan importante.”
“Lo hermoso del desierto es que en cualquier parte esconde un pozo” “Para ver claro, basta con cambiar la dirección de la mirada.”
“Sólo se ve bien con el corazón; lo esencial es invisible para los ojos.”
Y este video, tengo que añadirlo aquí, para quien no lo haya visto y para quien quiera volverlo a ver.
Esas cosas, como bien dicen en el video, "hace que las cosas por las que nos preocupamos, parezca tan patético..."
La mejor forma de demostrar el amor, la amistad, la valentía, el coraje... el saber ver, "lo invisible a los ojos"
Llevo tiempo buscando algún club de lectura interesante en el que compartir libros, recomendarlos y comentarlos, y por ahora no he encontrado más que uno y en el que es una pena que únicamente se ciñan a libros actuales, habiendo tantos libros de hace bastantes años que son incluso mejores que algunos de los actuales (por no decir que la inmensa mayoría)
También hay que decir que dependiendo de la edad se leen determinados libros, (aunque yo eso siempre me lo he saltado un poco, ya que cogía cualquiera de la biblioteca de mi madre, que es la que me ha inculcado la pasión por la lectura)
Me apetece hablaros de algunos libros que en mi vida han marcado de alguna manera significativa, no recuerdo en concreto cual fue el primer libro que leí en mi vida (sin lugar a dudas debería decir que el "Micho", del colegio, al que seguro que poca gente conoce ya), pero tengo varios, que desde pequeña he releído varias veces porque me encantan, y todos han servido para enseñarme algo.
Creo que uno de los primeros que cayó en mis manos fue "Momo" de Michael Ende (quién no lo conoce...), y hace poco he comprado una edición nueva porque lo tenía destrozado (y se lo he regalado a mi cuñada que seguro que le encantará), y el día de mañana si tengo la suerte de tener un hijo, probablemente sea el primero que le dé a leer.
El personaje de Momo enamora desde el primer instante, inspira muchísima ternura, y creo que es un libro que no vendría nada mal que volviera a ponerse de moda en estos tiempos, en los que el mundo se ha convertido en gente con prisa, que no tiene tiempo para cosas sin importancia, y gente como Momo, que aprende a valorar cada segundo que se vive, que sabe escuchar, y sin necesidad de dar consejo ayuda a los demás ( a veces no hace falta tanto hablar y solo "escuchar" realmente a las personas que tenemos alrededor).
Contiene multitud de metáforas, y personajes diversos con el que cada uno puede sentirse identificado o al que puedes tenerle más o menos cariño.
Uno de mis preferidos es "Beppo el barrendero".
Desde que leí este libro jamás he olvidado ese personaje y cada día de mi vida intento poner en práctica su filosofía.
Sin duda recomendaría a todo aquel (sin importar la edad que tenga) que leyese éste libro. Seguro que algo saca para su vida personal.
Yo sinceramente soy más partidaria de lecturas variadas, que enseñen "sin enseñar"... en lugar de libros de autoayuda que son los típicos que pueden recomendarte psicólogos, amigos que lo hayan leído y les haya ayudado... a mi parecer (y mira que estoy estudiando psicología), los libros de autoayuda sirven más para auto engañarse que para otra cosa.
Éstos libros, pensados la mayoría de las veces por el autor para el mero hecho de entretener, nos sirven más y nos marcan más que cualquier consejo, autoayuda o película. (Porque también tengo que admitir que soy más de leer primero el libro y después ver la película, aunque cueste, ya que sino la imaginación no funciona como debería) y es sorprendente a veces ver como lo que habías imaginado puede ser tan parecido o tan completamente diferente a lo que después en la película representan.
Otros personajes emblemáticos de éste libro son los hombres grises, el maestro hora, Gigi Cicerone (gran personaje) y la tortuga Casiopea.
Así que insisto... leerlo quien no lo haya leído, dárselo a leer a vuestros hijos, inculcarle la lectura desde pequeños porque es una de las cosas más hermosas que tenemos en la vida, sobre todo cuando es a manos de unos padres quienes te inculcan ésta costumbre, y puedes compartir con ellos algo más que comentar las tristes noticias que tenemos día a día en el telediario.
Fomentar la imaginación, que sólo así saldrán nuevas ideas tan importantes hoy en día para todo.
Fomentar la cultura en general, que poco a poco se está perdiendo... y tenemos muy grandes autores que nos han dejado su legado para continuar expandiendo su sabiduría e imaginación.
Seguir comprando libros, no solo descargando, que hay libros que merecen la pena tenerlos originales... y el placer de pasar una página "real" no puede compararse a deslizar un dedo por la pantalla...
Hoja a hoja... libro a libro... de padres a hijos, podemos recuperar un poco de lo que se ha perdido...
"La vida es como una caja de bombones"... La mía es un archivador, que se abre a su antojo... tener pensamientos sobre pensamientos, y de repente aparecer en tu mente algo que ni recordabas... o querer recordar algo y no poder, o al contrario... no ser capaz de olvidar y venirse imágenes, olores, sensaciones, que se escondían en algún recoveco de mi ser, con o sin intención de traerlos a mi memoria.
Mi cabeza es un ordenador, siempre en ON, sin resetear ni formatear, y empiezo a pensar que pienso a veces demasiado, y que por mucho que archive, compacte recuerdos o intente aparcarlos, van a seguir haciendo lo que le de la gana... porque al fin y al cabo nosotros somos dueños de nosotros mismos, y si esas carpetas se abren y otras no, será porque mi subconsciente ha hecho saltar algún resorte.
¿Y que por qué pienso en esto? O ¿A que vienen éstas ideas? ... pues a algo... seguro. Realmente, ¿Qué más da? Si poca gente me entenderá... si a veces no me entiendo ni yo... si a veces prefiero no entenderme y sólo dejarme llevar...
La vida se compone de épocas, de tránsitos que vamos pasando y comenzamos uno nuevo, que sin duda sabemos que en algún momento terminará, y eso es lo que lo hace tan especial... saber que nada es para siempre. Saber que debemos aprovechar ese instante que vivimos porque con toda probabilidad nunca volverá, o al menos no igual que en ese momento.
Nacemos, crecemos entre risas, llantos, alegrías, penas, juegos... entre todo lo que la vida nos depara en un futuro, pero viviéndolo de diferente manera.
Separamos nuestra vida entre periodos de colegio y periodos vacacionales, donde esos veranos interminables no sabemos valorarlos de esa manera, sabiendo que nunca volverán a ser esos veranos de playa, piscina, helados, juegos hasta el anochecer, sin más preocupación que desear que tus padres no te priven de quedarte un ratito más jugando en la calle.
Esos días en los que no piensas que en un futuro no volverás a tenerlos así... pero eso es justamente lo que nos hace vivirlos de esa forma tan intensa. Si supiéramos que de mayores nos tocará trabajar (a la inmensa mayoría) estaríamos tan preocupados de vivirlos intensamente que ya tendríamos una preocupación y no lo disfrutaríamos de esa manera tan infantil.
Igual que dividimos el día en mañana, tarde y noche, dividimos nuestra vida, nuestros meses, nuestros años, nuestros periodos... Nos pasamos la vida anticipándonos a lo que va a venir, aprovechando "éste momento" porque mañana será diferente.
Y mi pregunta es... ¿Por qué no simplemente, vivimos?
¿Por qué no dejamos de dividir, de mirar hacia adelante y hacia atrás y únicamente miramos el "ahora"?
Suena tópico, lo sé. Pero sabemos que un día todo terminará y vivir con esa angustia no nos deja disfrutar como un niño descalzo todo el día en verano.
La vida es una. No está dividida en nada, simplemente hay tránsitos, que nosotros hemos querido ponerles nombre. Infancia, niñez, adolescencia, adulto, mayores, ancianos, etapas intermedias a los que no sabemos ni ponerles nombre... pero todo es una única cosa: VIDA. Y como bien se sabe, "Hay niños de 80 años y adultos de 80 que son niños", y eso es lo único que cuenta, y es lo único que a mi me importa, no dejar atrás nunca ninguna parte de lo que he vivido, porque como en otra ocasión dije, de ello estamos hechos.
Hoy solo me importa vivir, mañana con toda seguridad también, y así será hasta incluso el último día de mi vida, y será entonces cuando mire atrás, y espero haber aprovechado mi vida de la mejor manera posible, de la que yo quiera, porque cada uno tiene diferentes intereses, ni mejores ni peores, tan solo diferentes.
Tenemos un principio, sabemos que tendremos un final... y ahora mismos tenemos el "Ahora" ¡¡Aprovéchalo como mejor te apetezca!! porque nunca volverás a este preciso instante.
Gracias de corazón, por cierto, a dedicar éste momento de tu vida a leerme.
Carta de una abuela (fragmento de "La hora de las gaviotas")
Te veo jugar y pienso en la fortuna que tengo de tenerte a mi lado. En que estos ojos que tanto han visto y ya poco ven, puedan verte crecer día a día, paso a paso.
El ayer es para mi como un mismo día unido en dos, pues tanto he vivido que el tiempo para mí pasa lentamente.
Nada espero ya de ésta vida, todo lo tengo, todo lo que he tenido y lo que tengo es solo para ti.
Eres carne de mi carne, el fuego de mi hoguera, eres el corazón de mi cuerpo, el latir de la esperanza... Lo eres todo, y yo, desafortunadamente, ya no soy nada.
No soy más que un estorbo que te mira atentamente, con admiración, observando como colocas cuidadosamente tus muñecas en sus sillitas de madera, que con tanto cariño me pediste un día y con tanto cariño yo te regalé.
Un día despertarás y ésta anciana no despertará contigo, no se despertará para ti, y siento miedo de que esto te afecte, de que te haga llorar.
Siento miedo de que no me recuerdes, de que yo sólo haya sido una figura borrosa, marchita y arrugada en tu memoria. De no ser abuela más que en las fotos que tus padres te enseñen. Quiero ser para ti lo que tú eres para mi, o al menos un destello de lo que tú eres.
Lentamente voy despidiéndome de ti, en este instante incluso, con ésta carta de confesión que espero de mayor comprendas.
Te veo y sonrío, te miro atentamente y lloro en silencio. Pequeñas lágrimas juegan entre mis arrugas y mis ojos empequeñecen entre ellas. Mis manos, temblorosas y con pliegues, entre los que sostengo ésta pluma, están deseosas de acariciar tu cabello, tus rizos, ya despeinados de tanto jugar durante el día, a pesar de que ésta mañana con tanto cariño y esmero te cepillé y coloque tus lacitos, mientras tú, al mismo tiempo, peinabas y adornabas el cabello de tu muñeca preferida, y seguidamente me dabas un beso y salías corriendo con ella gritando "Gracias abuela", mientras yo veía tus rizos desaparecer por el pasillo.
Son estas cosas las que a mi me llenan el día, hacen que cada día sea diferente al anterior, tenga algo interesante y me haga querer seguir viviendo.
Pero el dolor se encarga de recordarme que debo ir despidiéndome, aunque sea poco a poco, gesto a gesto.
¿Qué me queda ya por vivir que no esté unido a ti?
Ese sonido de cascabeles que se escapa de tus labios cuando te hago cosquillas por los pies, ese brillo de perlas blancas que dejas ver entre tus labios, tan parecidos a los míos en mi juventud. Esas manitas, regordetas y blanquitas que no tienen miedo a nada, que todo lo quieren tocar.
Esos ojitos con los que lloras cuando de noche la oscuridad pinta tu cara y sientes miedo en la soledad. Yo duermo a tu lado mi niña, no temas, siempre estaré a tu lado. Cogiendo tu mano para que no tengas miedo, alcanzándote todo a lo que no llegues, acariciándote el pelo para que duermas más rápidamente, y secando tus lagrimas para que tu rostro no se arrugue como el mío.
Nada me queda ya por enseñarte. Todo lo que he podido decirte te lo he dicho, la vida se encargará de enseñarte lo que falta, y yo estaré apoyándote, y es entonces cuando me recordarás, cuando recordarás las historias que tanto te gusta que te cuente, y los consejos que poco a poco he ido dándote. Es entonces cuando yo quiero que me recuerdes.
Cuando estés orgullosa de mí, a pesar de ser ahora un trasto inservible que se sienta en la mecedora de la esquina del salón, a observarte, a matar el tiempo antes de que el tiempo me mate a mí.
Recuérdame así cielo mío, y entonces tu abuela nunca morirá, tu recuerdo me mantendrá viva aunque solo sea en tu memoria.
Y así me despido de ti, querida nieta. Con unas palabras que he logrado arrancar de mi alma, que tanto tiempo llevaba reservando para ti.
Recuérdame con una sonrisa que ilumine mi imagen, no con una lágrima que la enturbie.
Te quiere: Tu abuela
(Con todo mi cariño a mi abuela Luisa, recordando como me cuidaba desde que tenía pañales, y como aún hoy en día, aunque pueda verla menos de lo que quisiera, sigue cuidándome y haciéndome cosquillitas) Te quiero abuela.
Y ahora que no estás... que tu tiempo se agotó... siempre permanecerás en mi corazón hasta el último día de mi vida. Te Quiero
Fuera empieza a oscurecer y mi alma es el reflejo
de esa vista tras mi cortina…
Apago las luces de mi corazón y solo dejo encendida
mi pequeña lamparita de la memoria… Ni siquiera mi transformación me permite
olvidarte.
El reloj quiere hacerme recordar constantemente,
sin cesar, que forma parte de la vida. Que estamos sujetos a él desde que
nacemos.
Tic Tac Tic Tac… pasan los segundos, soy consciente
de ello… Y no es solo mi tiempo… es mi espacio.
Y aun así dejo que el sonido del reloj me invada,
sin sentir temor de estar perdiendo nada.
Pasan así las horas.
Fuera no hay más luz que la de las farolas.
Ni una estrella, ni tan siquiera la luna se ha
atrevido a aceptar mi compañía.
El frío de la calle corta el cristal, empapado de
minúsculas gotitas… Debe ser que los Ángeles también lloran en silencio…
Mi corazón también permanece helado, mientras mi
cuerpo se calienta bajo la pesada manta impregnada en tu olor… bordada de
recuerdos…
Corro peligro de que mi corazón se resquebraje como
el fino cristal de mi ventana… como el hielo sumergido en agua…
Se resquebraja, lo oigo débilmente crujir en cada
latido, en cada golpe de reloj.
Nada hago por evitarlo…
Un grillo. Bajo mi ventana me atrevo a intuir,
entre la maleza que ha crecido en estos dos días en los que nadie parece
recordar que en esta calle habita vida.
Su cantar se intercala con el cantar de mi reloj,
con los latidos de mi corazón, a cual más pausado.
Entre esta oscuridad alzo mi mirada perdida,
buscando tu foto, dejando que mis ojos se acostumbren a vagar por estas
tinieblas, y poder enfocarte, para ver como desde ahí arriba, dentro de tu
portarretrato, me miras altivo, medio sonriendo…
Y me molesto a pensar que quizás en este instante
en el que nos miramos a través del tiempo, tú también estés observándome… Pero
esto no me reconforta.
Perder el tiempo con una persona…
Tiempo físico… Tic Tac,tiempo de reloj. Cada segundo en el que mi
recuerdo se pasea por tu mente, en el que te paras a verme en un papel al que
no puedes besar de verdad… Cada segundo en el que el hecho de escuchar mi
nombre te evoca mi olor, mi tacto, mi sonrisa…
Nunca será tiempo perdido, puesto que los momentos
que hemos querido compartir nos han hecho conocer más de nosotros mismos, y
quizás eso es lo que más hecho de menos… No solo a tu persona, sino a como soy
yo, a cómo me siento cuando estoy a tu lado… La persona que me haces ser.
Mientras estos pensamientos rellenan mi cabeza, voy
observando como el viento mece las flores del quicio de mi ventana, indefensas,
sin voluntad propia, dejándose mecer sin ton ni son… simplemente por que nada
pueden hacer contra ello.
El rocío les pesa y los pétalos, esta mañana
alzados hacia el Sol, ahora se reclinan presas de esta oscuridad que las apaga…
El reloj sigue marcándome el ritmo… lástima, no se
da cuenta que mis oídos ya se acostumbraron a sus latidos y ahora es como si
verdaderamente el tiempo se hubiese parado…
Tus cuentos personalizados, donde una princesa que se llamaba Blancanieves vivía en un castillo encantado, en el que la madrastra era su abuelita y la enviaba a coger manzanas al campo. El lobo feroz la perseguía y ella se escondía en la casa de los tres cerditos, junto con los cinco enanitos que la ayudaron a escapar por una torreta muy alta, antes de que el dragón llegase y matase a todos. El príncipe estaba dormido y no podía rescatarla, y Blancanieves tenía que ir a salvarle dándole un beso de amor, pero la reina malvada la mando apresar y la encerraron en un castillo con un gigante que tenia muchos colchones y una planta de guisantes.
La princesa escapó bajando por el pelo rubio de otra princesa y corrió para escapar de la Bestia que estaba en el castillo. Iba dejando miguitas de pan por el camino para que pulgarcito la encontrase y la ayudase a encontrar al príncipe, que estaba en casa del leñador en el bosque.
La princesa, con su caperuza roja y su canastita de manzanas, montó en su corcel , y cruzó el bosque encantado con Fujur para salvar al príncipe. Le dio una manzana encantada y un beso de amor y colorín colorado este cuento se acabado. Y fueron felices y comieron perdices.
Mis noches contigo, cogiendo mis sueños entre baladas de "Scorpions", "Queen", "Bob Marley", "ACDC", "Rolling Stones"... tantas noches sin apenas dormir, porque prefería empaparme de esa música que me hacia soñar más que mis propios sueños.
Tus dibujos, mis dibujos, el enseñarme a pintar. El incienso, y otros olores inconfundibles que te definen...
Los erizos, la pesca, el mar. Correr por la playa al atardecer siendo una niña, a tu lado.
Tu forma de andar, tus gestos, esa mirada penetrante de ojos negros vidriosos.
Tu pelo rizado, la cicatriz de tu nariz, tus dedos gordos a los que me encantaba agarrarme cuando salía a pasear siendo una niña.
Largas fantas de naranja al lado de tu cerveza.
Domingos de filetes de pollo empanado, patatas fritas, mostaza, película del oeste y vaqueros, tarde de diminutos, corte de helado y gallifantes. Domingos que perduraran en mi memoria de por siempre.
Tantos recuerdos, buenos, malos, que te definen. Que definen tu paso por mi vida. Hoy en día solo quiero recordar los buenos, y que vivas en mi memoria con la imagen que deseo recordar.
Te imagino, desde que te fuiste hace hoy ocho años, sentado en una nube, con los pies colgando, con los grandes, Jimmy Hendrix, Fredie Mercury, Marilyn... fumando, cantando y riendo. Y esa imagen, jamás nadie me la podrá quitar.
Al igual que la protagonista de mi historia, Alma, en la que en algunas cosas me baso en mí misma, he tenido la suerte de criarme entre la mejor música que haya podido escuchar y que hoy en día parece imposible que nadie vuelva a hacer.
Estamos formados de recuerdos y vivencias desde que nacemos, y en esto nos basamos para crear nuestra forma de ser, nuestros gustos y aficiones. No solo la genética influye en nosotros, también el ambiente. Tanto el que nos dan nuestros padres y familiares como en el que nos relacionemos en diferentes épocas de nuestra vida. Yo agradezco de corazón muchas cosas de mi infancia, casi estoy por decir que todas, por haberme hecho lo que soy, hayan sido cosas buenas o cosas malas, me han hecho fuerte y forjarme mi propia personalidad. Elegir mis gustos musicales, mis gustos de moda, escoger en definitiva que clase de persona quería ser.
Desde canciones de Xuxa, con la que todos nos volvemos locos cuando suena en alguna fiesta, porque todos conocemos y hemos bailado, canciones de nuestros dibujos animados y series de nuestra infancia, que con solo una pequeña estrofa que nos den comenzamos a cantarla entera y queremos continuar con más... "¿recuerdas esta?", "¿y esta otra?"... Hasta canciones de nuestra época, o canciones de la época de nuestros padres, que seamos de una década u de otra, siempre hemos escuchado la música de la década anterior.
Estamos hechos de cada uno de los días que hemos vivido, unos más, otros menos... pero todo nos ha influido de una manera u otra.
No podemos renunciar ni renegar de nuestro pasado, porque de el estamos formados, y debemos hacer que nuestro presente valga la pena, porque de ello depende nuestro futuro.
Alma, Ines, Michele, Narcisa, Paquita, Daniel, Paolo, Beatriz... Jessica... Mila... tantos personajes que conviven conmigo últimamente, a los que poco a poco se les va tomando cariño. A unos más que a otros, y a otras en especial más aun...
Ahora comprendo más que nunca, a pesar de haber escrito poesías sobre todo, lo que supone escribir con el alma, y poner todo el sentimiento y cariño en cada letra. La vida de estos personajes depende de mi propia vida, de las de personas cercanas a mí, en las que he podido inspirarme, y personas que me acompañan en este proyecto y sienten lo que voy sintiendo.
De nuevo gracias por el apoyo, por el tiempo, por la paciencia, por el cariño, por todo lo que este proceso conlleva...
"La historia con mi padre es tan
compleja, que no sabría cómo definirla, ni por dónde empezar. De esas historias
que no tienen un comienzo.
Se llamaba Miguel. Michele Raisa
Marinaccio. Aunque el segundo apellido no se usa, pero a mi padre le encantaba
decirlo, para que se supiera su procedencia. Era italiano, nacido y criado, pero su familia
vino a España cuando murió mi abuelo Bruno. Desapareció en alta mar. Mi abuela
Narcisa no pudo soportarlo y emigraron a España, a casa de unos familiares
lejanos de mi abuela. Y aquí se quedaron, en Cádiz, cerquita del mar, porque
eso nunca podría perderlo de vista mi abuela.
Supongo que tendrá la
esperanza de que el mar se lo devuelva, o al menos la tendría, o quizás solo
necesite verlo porque le recuerde a él, o no sé la verdad... Jamás he querido
sacarle ese tema a mi abuela porque sé que mi abuelo Bruno para ella fue el
amor de su vida, y perder a tu marido en el mar debe ser muy duro… no recuperar
jamás su cuerpo y no poder darle sepultura… no quiero imaginarlo.
Y años
después perder a un hijo… esa no es la ley de la vida.
Así anda la pobre, encorvadita
y más arrugadita de la cuenta de tanto llorar. Como los garbanzos cuando los
pones en remojo.
Mi abuela lleva demasiado peso de la muerte en su espalda, y
la suya empieza a echársele encima…"
Hay personas que llegan a tu vida sin que tú las hayas elegido, sin ser amigos, sin ser familia de sangre, pero que pasan a convertirse en personas fundamentales en tu vida. Te hacen preguntarte cómo has podido vivir todo éste tiempo sin ellas...
A la edad de 31 años aún tengo la suerte de conservar 3 abuelos, grandiosos y enormes para mi los 3, y mi abuelo Jacinto que hace ya diez años que nos dejó.
Pero he ganado dos nuevos abuelos, políticos, que son a cual más maravilloso, que los quiero como si fuesen de sangre, y se que ellos me quieren a mí como a una nieta más, y eso es lo más maravilloso que puede pasarte.
Con todo mi cariño, el video que le hicimos para su cumpleaños, y espero que podamos seguir celebrando muchos más.
Las cosas se hacen mejor despacio, con calma, con mucho mucho tiento... Pensando, sintiendo los impulsos y canalizándolos de la manera que mejor nos convenga o decidamos en cada momento.
Los impulsos son vida, son palpitaciones, son pulsaciones de nuestro corazón. Y debemos hacerles caso en cualquier circunstancia, porque son lo que nos mantiene vivos.
El dolor es una manera de sentirse vivo, de sentir esas palpitaciones en nuestras heridas, en aquellas zonas que sentimos ese dolor. La risa es otra manera de sentir, de palpitar nuestro corazón de manera acelerada, de sentirnos vivos con cada carcajada.
De una manera o de otra, todo es vida, todo son sensaciones, impulsos...
Despacio y con calma... pausada pero no entrecortada, con ánimo, fuerza, ganas...
Con corazón. En una sola palabra que todo lo embarca...
Con toda mi ALMA...
Os dejo un pequeño adelanto, que espero guste y sea algo importante en mi vida.
"Cuando la sensación de "estar perdida", te invade demasiadas veces en tu vida... empieza a dejar de ser una sensación y pasa a convertirse en un estado.
Lo positivo de éste estado, aunque yo no suelo ser propensa a ser positiva, es que si te encuentras perdida... sabes que volverás a encontrarte.
No todas las historias tienen un comienzo, o al menos no todas consigues recordarlo, pero siempre hay un detonante que te impulsa a empezar esa historia, y mi detonante es, a las seis de la mañana, con mi sufrido insomnio... unas gaviotas.
El poder de la música... indescriptible como unas cuantas notas de una canción pueden hacerte evocar momentos lejanos, o soñar despierta con miles de fantasías que no te atreverías a pensar sin esa música de fondo que despliegas tus alas de la imaginación...
Hacerte llorar, sonreír, estremecerte... descubrir que algo te une a millones de personas desconocidas que sienten lo mismo que tú con determinada canción.
Como dos personas que a la vez miran las estrellas por la noche y aun en la distancia saben que están mirando el mismo cielo, y a través de las estrellas te sientes unido.
Como sé, que desde las estrellas a veces pueden oír contigo...
La música... nuestra cómplice, presente en los momentos más importantes de nuestras vidas... y en ella guardaremos siempre nuestros recuerdos para que nadie pueda descubrir sentimientos ocultos en nuestras almas...
"Bitter sweet symphony"
Mi canción... porque siempre me sentiré unida a ti... porque me das la vida... TÚ... La Música
(Gran canción de un gran artista Richard Ashcroft acompañada de otro grandísimo Chris Martin)
Hoy tengo dos palabras para definir éste día : "JUSTICIA" e "INDIGNACION"
Por fin avanzamos en el caso bretón y es de las pocas veces que me puedo sentir orgullosa de la Justicia Española.
(Soy consciente de poner bretón con minúscula, es mi intención porque no merece mi respeto ese apellido)
Desde el 8 de Octubre de 2011 ha sido un auténtico sin vivir para esa familia, y todo apuntaba a que tendríamos un nuevo caso "Marta del Castillo", a lo que ya nos viene acostumbrando el ver las noticias dia tras dia, y ver como aquí en España los chorizos están a la orden del dia y se paga más caro comprarle pañales y potitos a tus hijos con una tarjeta encontrada que gastarse 800€ en lacasitos, o esconder un cuerpo para que no haya Delito.
Como estas barbaries puedo nombrar mil y una y de diferentes personajes y partidos políticos, no con este ejemplo dejo claro mi postura en cuestión a la política, simplemente me pareció un dato extremadamente curioso y actual... que les podría haber dado por comprar un "pony"...
Aun asi voy a mojarme y siento para muchos decir que mi inclinación política ha pasado por varias fases, de ser de izquierda por defender la libertad y ver que se confunde con libertinaje, a ser del PP y descubrir que el basarse en el capital para levantar el país se refieren al capital del pueblo, no al de ellos. Con lo cual mi partido actual es el de que se vayan todos y los jóvenes formados y con ganas tomemos el mando para levantar este país de chorizos.
Retomando el tema...
Hoy 12 de Julio ha salido el veredicto para éste individuo, basado en 21 puntos que han sido probados por UNANIMIDAD.
Y aun asi, hay personajes que se atreven a exponer públicamente sus "ideas". Libertad de expresión, cierto, por eso yo también hago uso de dicha libertad y aquí os expongo lo que esta tarde he encontrado por twiter.
Mi twiter, para todo aquel que quiera acceder es @zulemafeteira
(pendiente de adjuntar fotos, pues ha habido problema técnico)
Indignación es la palabra que más se asemeja a la repugnancia que me ha dado ver semejantes crueldades y comentarios. Estos solo son alguna muestra de las barbaridades que puedes encontrarte en las redes sociales.
Y todo esto me hace plantearme una cuestión...
Sinceramente, hablando todos y cada uno de nosotros con el corazón en la mano, en nuestra casa, sentados a la mesa viendo las noticias, viendo como los ojos de ese loco ni parpadean, ni se inmuta... ¿No es cierto que todos nos hemos sentido un poco Ruth? ¿Qué todos hemos pensado si eso le pasara a mi hij@, sobrin@... lo cogía por mi cuenta y lo mataba aunque después me metieran en la cárcel a mi?
Cuantas veces habremos pronunciado esta frase... que tire la primera piedra el que no...
Y después... ¿Podemos hablar de igualdad? ¿De ser seres sociales? ¿De libertad?
¿En que mundo vivimos señores? En el mundo de la hipocresía, el mundo en el que de boca para afuera yo soy justo, yo soy liberal, yo soy .... pero a la hora de la verdad manda nuestro instinto de supervivencia y de proteger a los nuestros, a nuestros genes... y dejamos el raciocinio a un lado... porque todos, sino mataríamos a éste personaje como a tantos otros, le haríamos sufrir como mínimo. ¿Nos convierte eso en malas personas? ¿Y encima nos tachan de nazis si pensamos en la ley del Talion?
Por favor...
Hay personas que ni siquiera merecen ser llamados "humanos", ni animales si quiera, puesto que nosotros mismos nos convertimos en animales en estos momentos en los que abandonamos el raciocinio... no tienen nombre estos "seres inertes".
Y haciendo uso como antes mencioné de la libertad de expresión, desde aquí quiero ante todo dar mi más sincero pésame a la familia, y mi completa enhorabuena (aunque aún no podamos cantar victoria) por conseguir que se pueda empezar a creer en la verdadera justicia y todo aquel que merezca pagar pague por sus delitos.
Y a todos éstos GILIPOLLAS por que no tienen otro nombre, que sacan chistes de temas tan serios como éste... no voy a decir nada porque ellos no merecen que pierda mi raciocinio.
Aquí me dejas, abandonada a mi suerte... o mi desgracia...
Apiadándote de mi cuerpo de plástico, inerte, como la rosa que me regalaste...
Moribunda, exhalando su último suspiro entre mis dedos, como yo lo exhalo entre los tuyos... dejando la vida atrás, y los recuerdos a un lado, entreviendo tus ojos desde los míos.
Y aquí me dejas, sin importarte donde iré o si me quedaré.
Pateando mi alma con tus punzantes palabras, dejándome agonizar rodeada de mentiras e ilusiones ficticias.
Nada importa ya, en este limbo nada es lo que parece, la muerte puede llegar a resultarte una nueva vida, y la vida una agonizante muerte.
Pero he aquí la belleza de la vida... yo te perdono sin tú ni siquiera saberlo, pues hasta el dolor puede llegar a ser hermoso. Una tortura léxica, literaria, dolorosa y punzante para mis oídos, me hace arrancar de mí sentimientos ya vacíos... hermosas lágrimas de liberación, inquietudes inexistentes...
Pero yo te perdono, porque sé que no eres dueño de tus actos. Que el odio nace de la cobardía... y espero que tú, sepas perdonarme, sepas recordarme como yo te recordaré... eligiendo los mejores momentos que juntos hemos vivido, permitiendo que el amor venza a la muerte de los recuerdos...
Recordando que nos hemos amado, y que nadie muere si en la memoria el recuerdo permanece vivo.
Aquí me has dejado, oliendo el aroma ficticio de tu rosa artificial...
Estaba una noche a orillas del mar, escuchando el murmullo de las olas que se batían contra las rocas, cuando de entre las aguas salió una burbuja.
Lentamente se fue elevando sobre mi cabeza hasta posarse a varios centímetros de mi, abriéndose cual girasol se abre ante los primeros rayos del Sol, y de esa burbuja saliste Tú, radiante y lleno de vida, y con tus dedos tocaste mis labios, acercando tu boca a la mía, fundiéndonos en un abrazo...
Abrí mis ojos y Tú no estabas allí... el Aire me estaba besando y la Luna me abrazaba con sus blancos reflejos.
Volví a sentarme en la orilla, recelosa de lo que había pasado, recordando tu rostro besando mis labios, escuchando el murmullo de las olas, y esperando...
Pero Tú no apareciste, no había ninguna burbuja, no estabas Tú y la Luna poco a poco fue escondiéndose de su enemigo Sol que con solemnidad iba manzando poco a poco el Mar con su calor.
¿Dónde estabas?
¿Por qué te fuiste sin despedirte?
¿Por qué un solo beso?
Estaba una mañana tumbada en mi cama, abrazando mi almohada húmeda, y una burbuja regresó a mi mente, y de ella saliste Tú, tocando mis labios con tus dedos, besándome en la soledad.
Abrí mis ojos y allí estabas Tú, observándome como dormía, secándome las lagrimas con tus dedos, besando mi frente con tus labios...
Y esa burbuja explotó... dejándome sola... ante la inmensidad de la vida.
Hoy cambio radicalmente de tercio, y con un poco de miedo pero esperanzada quiero hablaros de un tema bastante peliagudo y actual, aunque viene dándose desde hace demasiados años desgraciadamente :
El bullying "acoso escolar"
Quiero hablaros desde mi punto de vista personal, abrirme con la esperanza de que cada nuevo caso de cada persona sea un punto de inflexión para que podamos erradicar los abusos, sea del tipo que sea, porque no únicamente podemos hablar de bullying escolar... desgraciadamente en la propia familia, circulo de amigos o cualquier tipo de circulo social y personal pueden darse casos.
No se sabe cuanto daño puede llegar a hacerse hasta que no lo sufres. Y hablo ahora mismo con tembleque de manos al reconocer que he pasado por esto pero que gracias a la fuerza de voluntad y ciertas personas he sabido superarlo... pero hay personas, en especial jóvenes que no saben hacerlo, no saben como hacerlo y no disponen de la ayuda necesaria.
Desde pequeña tartamudeaba, de hecho hoy en día cuando las circunstancias me pueden sigo atascándome en algunas palabras. ( Por este motivo me dedique a escribir desde muy joven)
Parte de mi propia familia, sin pensar si quiera en el daño que podían causar, se metían conmigo, me imitaban, se reían de mí, me señalaban con el dedo y me hacían sentir inútil, torpe y que no servía para nada.
Mi estatura fue otro motivo para burlarse, pero ese sinceramente no me afectó para nada.
Y de insultos obscenos... ya de eso ni hablo mejor. Todo superado.
Todos esos insultos, burlas... te acomplejan, te hacen agachar la cabeza, sentirte inferior a los demás, no querer hablar ni aunque sea determinante y esencial lo que tengas que decir. Te acostumbras a la soledad, el silencio, las lágrimas sobre la almohada, tus pocos amigos que te comprendan y sean igual de "raros" que tú, y poco más... porque a veces, como he dicho, los "adultos" (y digo adultos entre comillas porque son mas críos que los propios niños) no detectan el problema e incluso ellos se suman a ese acoso y derribo de la persona.
Cualquier tipo de comentario puede dañar, desde el mas simple como "fea", hasta "puta", "bulímica", "ninfómana", "negr@", "tartamuda", "idiota", "inútil".... todo aquel que dañe al ego de la persona.
Y es inevitable que esto deje de ocurrir, pero si se puede evitar que la persona perjudicada sufra sin necesidad. No podemos callar las bocas de los acosadores, de los que inventan estupideces o se dedican a divulgar blasfemias por el mero hecho de hacer daño, pero debemos aportar nuestro granito de arena en no consentir que esto siga ocurriendo a nuestro alrededor, empezando por nuestro circulo mas cercano.
Yo, desde mi caso, me refugié en mi misma, pasé por una depresión en silencio, me escondí entre mis libros (a los que les debo la vida), en mi madre, y en mi fuerza de voluntad y coraje que fui sacando con los años... porque no iba a consentir que nadie pudiese conmigo, porque soy una persona como otra cualquiera y ninguno de los que me insultaban eran más que yo... Pero a todo esto no se llega sola, no cuando eres pequeña y nadie sabe ni que te ocurre, solo que eres... tonta, callada, introvertida...
Hay que detectar, hay que hablar y sacar valor para contarlo (encontrar la persona adecuada), hay que estar pendiente a nuestros niños y tener buena relación con ellos para que sean capaces de contar todo lo que les ocurra y sucede en sus vidas, que no por ser mas pequeños, su vida es menos intensa que la de los adultos, ni las cosas que les ocurren son menos importantes.
Cada edad tiene su momento y su importancia, y lo que es importante para nosotros ahora, como es pagar las facturas, a los 15 años eso ni lo pensábamos, pero lo que es importante a los 15 años como que el niño que me gusta de la clase de enfrente me dice gorda, a esa edad es un mundo, y para nosotros lo fue... aunque ahora pensemos "menuda chorrada" o "déjate de tonterías que problemas son los que yo tengo". Esto es un gran error y hay que solucionarlo.
Debemos pensar que aunque tengamos 30 o 40 años, hemos pasado por los 10 y los 15... y esos problemas también los tuvimos, y hubiésemos querido que nos ayudasen.
Nos lo debemos a nosotros mismo, porque todos hemos pasado por algún tipo de acoso.
Se lo debemos a ellos, a nuestro futuro, porque sea un futuro mejor y podamos aportar nuestro pequeño granito de arena.
Y yo desde aquí es lo que pretendo hacer, aunque esto pueda considerarse suicidio social como suele llamarse por sacar a la luz ciertas cosas... no me avergüenzo, sí, tartamudeo a veces, si, he sido gorda, sí, he pasado por la bulimia por culpa de los insultos por querer verme guapa. Sí, he sido "retraída" y algo rara, sí, ahora puedes verme andar con la cabeza alta y puedes llegar a pensar que soy del tipo "aquí estoy yo"... y bueno... sí, quizás pise fuerte, pero conóceme.... conoce el motivo de porque soy ahora la persona que soy, conóceme y verás, que no soy más que tú, que soy lo que la vida me ha hecho ser, que soy una persona sencilla que ha pasado por ciertas cosas, quizás las mismas que tú y quizás por otras... pero soy fuerte ante todo, y aunque haya tenido momentos de debilidad, nadie ha podido conmigo... y ahora soy feliz con la persona que soy. Y doy gracias a todos los que han pasado por mi vida por haberlo hecho, sea para bien o para mal me han ayudado a forjarme.
Y aunque en mi caso personalmente haya salido "todo" "bien"... hay muchos, demasiados... en los que su fin es diferente... o se convierten en personas que no quisieron ser...
Colaborad siempre en ayudar y aprender a detectar estos casos, y jamás seáis uno de los motivos para hundir la vida de una persona.
Llevo ya días así, que no levanto cabeza ni para mirarme a los ojos, y es algo por lo que muero...
Me voy ahogando en un minúsculo vaso de agua, en un vaso de chupito quizás, pero para mi ese vaso ya está demasiado lleno, y mi cabeza no consigue salir para tomar una bocanada de aire...
Me siento vacía por dentro, muerta por fuera, y los nervios me consumen segundo tras segundo.
Ya no tengo estómago, ya no me quedan fuerzas para nada, y mi corazón late desenfrenadamente.... se acelera velozmente sin motivo aparente....
Me siento cada día más sola... más consumida...
Ya no lo soporto más, ya no sé si la casa se me hace grande o es demasiado pequeña.... pero sé que no es lo mismo ésta soledad de ahora que la soledad de antes... buscada...
Ésta soledad me está consumiendo, está acabando con mi felicidad, paso demasiado tiempo conmigo misma y ya no me soporto...
Si pudiera comprenderme... si pudieras entenderme... si supieras creerme... si alguien supiera como entrar en mi cabeza y explicarme con otras palabras...
