Hay días que el corazón se dispara y no puedes controlarlo ni controlar ninguna de tus emociones. Las lágrimas son las dueñas de tus ojos, el corazón el dueño de todo tu cuerpo, la mente desaparece convirtiéndose en una mera pantalla de cine donde se proyecta todo lo que no quieres ver, y retumban en tus oídos palabras y bandas sonoras que quisieras poder taponar y dejar en cualquier rincón.
Revives momentos, sentimientos, acciones, todo se refleja nuevamente en el cuerpo, apoderándose de ti una ansiedad que creías desaparecida, que esperabas no volver a sentir.
El mundo se paraliza pero fuera todo sigue... y no comprendes porque no puedes cambiar las cosas, por qué no puedes hacer que gire todo un poco más a tu favor...
Por qué todo se resiste...
Por qué un sentimiento bonito de antaño te provoca ansiedad... porqué un mal momento también te lo provoca...
Porque necesito que vuelva... y necesito olvidar...que uno borre al otro... pero... la vida se compone de "peros" inexplicables...
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