miércoles, 30 de julio de 2014

No somos un todo... ni un nada.

Dicen que cuando tocas fondo sólo puedes subir y emerger de ese pozo...
Yo discrepo totalmente.
No creo que jamás toquemos fondo... No creo en la totalidad finita de las cosas, no creo que o sea todo o sea nada. No creo en el fin de nada... Un vaso está medio vacío o medio lleno, cierto, pero cualquiera de los dos es positivo.
Medio vacío puedes llenarlo más... Medio lleno puedes llenarlo más... O vaciarlo en ambos casos si necesitas beber. Y volverlo a llenar, o medio llenar...
Siempre podemos mantenernos a flote en cualquier circunstancia, porque nada es negro o blanco... Todo tiene una doble vertiente dentro de la otra, todos tenemos algo a qué agarrarnos para no caer... Sólo hace falta verlo, sentirlo, pensarlo, conocernos y en ese momento ser fuertes para aferrarnos a ello.
Las personas no son débiles o fuertes, somos personas y esos dos adjetivos conviven con nosotros día tras día, y en ciertos momentos somos uno o somos otro.
Pero no somos totales. No somos de una manera determinada siempre.
Todo influye... Genética, circunstancias, desarrollo, alimentación, ambiente, educación, crianza... Todos influimos en todos y en todo. Porque un acto o una palabra mía puede influir en alguien cercano a mí o alguien que ni conozco, porque todo es una cadena... Que gira... Que nos une a cada uno de nosotros. Que hace que seamos un todo. Un mundo... Con diferentes mundos en cada organismo... Que nunca tiene un fin. No somos personas incompletas que necesitemos de otra para "sobrevivir", el ser humano de por si es un animal dependiente desde su nacimiento, pero dependiente no significa que alguien sea imprescindible en la vida... Solo necesitamos de otros seres humanos porque somos seres sociables, con unos fines propios de cualquier animal. Pero nadie, nadie... Completa a otro. Sólo necesitamos de compañía, de apoyos, de sentimientos que nos hagan querer a una persona a nuestro lado, llamese "X" en cualquier momento de nuestra vida.
Algunos nos harán sentir mejor o peor, más felices y más fuertes, pero nadie es fundamental para que nosotros podamos ser nosotros mismos. Nosotros ya somos nosotros. Un uno que nos complementamos de otros... no de una sola persona, sino de todo lo que nos rodea...
Personas aprendiendo a "ser"... a través de otras personas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario